martes







¿PRINCESAS?

¿DISNEY?





Tía, qué fuerte. Mira lo que me pasó el otro día. Estoy supermuerta de vergüenza y no quiero ni encontrarme al Johnan por ningún lado.
Tía, tengo que hacer campana para no verlo.
Qué no, qué no, tía. Que no puedo verlo. Anda vámonos al kiosco a comprar cuches y te cuento.

Pues mira tía, ya sabes que desde hace dos semanas, justo después de enrollarme con el Mikel, que me justa el Johnan que te cagas, y me quiero liar con él. Bueno, quería. Ahora no lo quiero ni ver.
Pues eso, que yo le iba detrás. Pero él se estaba enrollando con la Tessa y no me hacía caso.
Tía, ya sé que la Tessa es nuestra amiga, pero es que un tío es lo primero, ¿no?.
Bueno pues lo que tú quieras... En fin, que me enteré que el sábado por la noche sus padres se iban de cena y necesitaban una canguro para la hermana pequeña del Johnan, la Lilimar. Y yo, con tal de meterme en su casa, pues me ofrecí de canguro.

Pero cuando llegué a su casa me encontré con que el Johnan había salido con la Tessa y que iba a estar sola toda la noche con una niña de cuatro años.

Total, que anda qué no es repelente ni nada la criaja. Le dije que si quería ver alguna de las cincuenta mil películas de dibujos que tiene mientras yo telefoneo a mis colegas, y la niña me dice que ya las ha visto todas y que quiere que le lea un cuento.
Y cómo le iba a leer un cuento, si para ponerme divina de la muerte llevaba puestas una lentillas azules con las que no veía nada... Pero como la niña insistía tanto, pues no me quedó más remedio que leerle un cuento.
¿Y qué cuento? Ya se los habían leído todos y quería uno nuevo. Así que se puso a patalear que quería uno nuevo y no paró hasta que salimos a comprar uno.
Lo único que estaba abierto a esa hora era la gasolinera. Y como el tío de la gasolinera está que te cagas, pues le dije a la niña que fuera eligiendo algo mientras yo intentaba quedar con él.
El tío pasaba bastante de mí y sólo me prestó atención para cobrarme. La verdad que se rió un poco de nosotras por el cuento de princesas Disney que había cogido la Lilimar.





Yo le especifiqué que era para la niña, y él se rió aún más.

Yo la verdad que no le veía la gracia. Y en ese momento pensé que el cuento era superchuli, porque yo siempre he querido ser princesa.

Luego, en casa, cuando se lo iba a leer, descubrí que era una revista, con peli y todo. Las secciones me parecían un poco raras, pero entre que la revista estaba escrita en castellano y que con las lentillas no veía bien , pensé que era yo que estaba confundiendo las letras.

Aun así lo que me quedo claro es que el primer reportaje iba sobre como arreglar un enchufe...


Y yo pensé que para qué quiere una princesa, o una chica fashion como yo, aprender a arreglar un enchufe. Si eso ya lo hace papá, o alguien al que paga papá, que se llama electricista, que se ve que no han ido a la universidad y sus padres les castigan ha trabajar de esto.

Pero claro como Jazmín es una princesa mora y vive en el desierto moruno, que es un lugar sin tiendas de ropa ni piscina, y como se aburre sin novio pues tiene que hacer cosas como esa.

El segundo artículo era Ariel y el seto. Ese título no me pareció nada glamuroso, así que decidí no leérselo a la niña... Ariel y el gladíolo o Ariel y el lirio, me parecerían títulos más apropiados para la sección de jardinería. Pero, es que no sé qué puede haber dentro de un seto, que merezca la pena ser conocido por una chica fina.

En esa misma pagina había un labio-consejo, que es un consejo más antiguo que la escritura y que te lo cuenta tu abuela por la boca, que trababa sobre lo bien que van los chismorreos susurrados al oído para enterarte de todo. Yo eso ya lo sabía, pero creí conveniente contárselo a la niña.

Luego explicaba como ilustrar a las perlas. Pero esto tampoco lo leí, porque todo el mundo sabe que las perlas ya vienen ilustradas de la joyería. Menuda tontería de reportaje.

En la siguiente página venían los pasatiempos, que eran superchungos y no supimos hacer ninguno. Pero me sorprendió que Blancanieves en vez de buscar un tampón, buscase una compresa, mira que están anticuados. Como la niña no sabía lo que era un tampón, me saqué uno del bolso y le expliqué como funcionaba y para que servía.




Luego llegó el labiotest ¿ con qué princesa pasarías una noche en el seto?. Desde luego, qué manía le había entrado a la revista con el tema de los setos. Es qué no hay otro lugar con más clase donde pasar una noche con una princesa.

Yo no entendía nada, así que le planté la peli, que venía con la revista, a la niña y me fui a la cocina a telefonear.

Total, que no sé cuanto tiempo me tiré hablando. El caso es que, de repente oí a los padres del Johnan que habían llegado a casa. Me asusté bastante porque gritaban como locos. Cuando entré en el comedor vi a la madre quitándole el tampón de las manos a la niña, que estaba con los pantalones bajados, al padre superfurioso ojeando la revista y a la bella durmiente dándose el lote con la Mulan en la tele.

No veas que bronca me cayó encima, llamaron a mis padres y todo. Se ve que se trataba de una revista de lesbianas. De lesbianas !!!. Para qué coño quiere leer una lesbiana. Es que no basta con que lean las frikis... Total que lo peor es que a mitad de la bronca apareció el Johnan, y no veas cómo se rió de mí.

Pues tía, menos mal que al final les pude aclarar que todo había sido una confusión y no me castigaron mucho. Pero quedé como una tonta que no sabe ni leer.

Qué razón tienen los profes cuando nos advierten de que el castellano es la lengua del anticristo y que leerlo trae mala suerte.

lunes









Carrie



Tía, estoy supermalísima de acostarme y lo mejor es que no vaya esta noche al baile de fin de curso.

Tía, pues si dejo plantado al Borja´s me da megaigual , por las veces que me ha hecho él lo mismo.

Sí tía, ya sé que el baile es lo más de lo más y que es una putada que me quede en casa, pero ya he tomado una decisión irreparable.

Que qué es lo que me pasa. Pues mira tía, te voy a ser supersincera, ¿vale?.

Pues mira que ayer vi una peli superterrorífica de cagarse y como llevamos todo el año haciéndole la vida imposible a la Puri, pues no quiero que me mate escabrosamente. Debes entender que yo no podría soportar una muerte así.

Que qué te estoy contando. Carrie, te estoy contando Carrie.






Pues mira la peli va de una pava que va al insti, y es superfriki y todas las de su clase, como es normal, se meten con ella.

La peli es supervieja y la gente va vestida superhortera que te cagas y los peinados son horrendos.

Pues la pava además de friki es supercateta y le viene la regla en el vestuario del insti, y en vez de dar saltos de alegría, se pone superhistérica porque se piensa que se va a morir desangrada. Y, claro, pues las tías empiezan a reírse de ella. Es superdivertido, porque además le tiran compresas supergrandes y tampones por encima, pero entonces llega la seño de gimnasia que es una puta y ayuda a la friki.




Yo no sé que hay de malo en reírse de una friki. Pero la seño puta esa castiga a las de su clase por haberse metido con ella. Y como además de puta es una zorra, pues a las que más castiga son a las guais.

Total que la seño le dice a la friki que lo que tiene que hacer es arreglarse y echarse novio. Pero la friki que lo ve supercomplicado comienza a mover un cenicero con un parapoder supernormal que tiene.

Y entonces se va a su casa y es cuando me di cuenta que la peli no era de risa, porque me pegué un susto al ver a la madre superchunga con pelos de superloca de la friki que casi me hago de todo encima. Qué horror de mujer, qué estilismo. Y encima era una fantástica religiosa que vendía biblias y coranes.

Bueno, pues cuando la Carrie le dice a su madre que tiene la pepa, la vieja se pone como una loca a pegarle y a llamarle puta, y le canta sermones, y la friki le rompe los jarrones con el parapoder

Total que la seño puta castiga a las guais a no ir al baile de fin de curso y anima a la friki a que vaya.
De guais habían varias pero había una supermala, que me recordaba un huevo a ti, que decide vengarse de la friki y otra más buena, o tonta, que decide dejarle el novio a la friki, porque se arrepiente de lo que hizo.




Y llega el día del baile, y la friki se compra un vestido supercutre, que parece un camisón, y se peina superlacia. Pero su madre se niega a dejarle ir al baile y le mete miedo diciéndole que es una puta como su padre, que se la van a follar y mil barbaridades más, además de rezar. Pero Carrie está convencida de que esa va a ser su gran noche y se coge el bolso y se va al baile.
Total que en el baile, la guai chunga envia a un grupo de colegas a que cambien las papeletas de la elección de la reina del baile para que gane la friki.


Y cuando Carrie se sube al escenario le tiran en todo lo alto un cubo lleno de sangre y cosas de cerdo. Mira, entonces la friki se quedó como desnortada y empezó a tener como una paranoia en la que todo el mundo se reía de ella. Y en ese momento se le desata el parapoder supernormal y empieza a destrozarlo todo y a matar a todo el mundo con su mente.
Madre mía, qué carnicería... Se carga hasta a la seño puta.


Total que llega a su casa muy arrepentida y le dice a su madre que la quiera y la perdone, y la madre le clava un cuchillo. Y ya está otra vez desatada, menuda nochecita, y le clava a su madre doce mil cuchillos de cocina que saca de un cajón y la madre tan feliz porque parece un santo. Eso le da todavía más rabia a la friki que le prende fuego a la casa, te recuerdo que era tonta, con ella dentro y muere.







Así que ya te digo que la peli me ha predispuesto y prefiero no ir al baile. Además la Puri también tiene parapoderes que yo la he visto.

Que qué he visto. Pues la he visto meterse trozos de gomas en la nariz, comer bocatas de panceta, sacar dieces y una vez en el vestuario la vi sin depilar...

Ves como da mal rollo.

Qué te lo has pensado y tampoco vas al baile, pues haces bien. Si quieres puedes venir a mi casa, que me quedo sola, y podemos ver una peli que me ha dejado el Jason. Se llama Viernes Trece, y me ha dicho el Jason que trata de trece amigos que se van al monte un viernes y se lo pasan de muerte. Venga no seas tonta, coge tus cosas y vente que nos lo pasaremos de miedo.